El software gratuito se puede configurar para evitar que menores accedan a contenidos inapropiados.
La aplicación funciona en computadores y dispositivos móviles.
El software fue creado y desarrollado durante el 2011 por el uruguayo Alan Kind y su socio, el argentino Martín Larre, y en mazo de 2012 fue lanzada oficialmente, en una prueba con 250 familias de diferentes países de Latinoamérica.
En agosto de ese mismo año, sacaron al mercado de habla hispana y portuguesa las versiones para Windows y Mac y en la actualidad también está disponible para móviles que trabajan con sistema operativo Android, IOS (Apple) y BlackBerry OS.
Recientemente, la aplicación fue reconocida por la prestigiosa Universidad de Harvard (Estados Unidos) entre diversos proyectos de 16 países como China, Canadá o India.
El software se puede descargar desde la página oficial, con lo que cada familia tendrá una cuenta para crear hasta cinco perfiles, según la edad, género e intereses de sus hijos.
Lo peculiar es que esta cuenta puede ser utilizada en todos los computadores que tengan instalada la aplicación, facilitando, por ejemplo, que los niños naveguen en Internet en la casa de sus abuelos, tíos o amigos de manera segura.
Larre se especializó hace años en el desarrollo de aplicaciones para niños pese a haber estudiado Derecho y no puede ocultar su entusiasmo con el proyecto.
"La idea surge como respuesta a un problema global: el problema de la relación entre niños, padres e Internet", afirmó Larre.
La aplicación está diseñada para niños hasta los 8 años, y lo que ofrece son básicamente dos cosas: seguridad y contenidos especializados para cada niño. Seguridad porque la aplicación permite a los niños navegar en un ambiente seguro y controlado por sus padres, y contenidos especializados en función de lo que el menor consuma en Internet y de las preferencias que denote en sus búsquedas.
"Con KidBox queremos tranquilizar a los padres, sus hijos van a tener todos los beneficios de internet pero en un ambiente seguro y controlado", agregó Larre.
La aplicación tiene dos versiones: una gratuita y otra de pago. En esta última existen servicios como videomail, con el que los pequeños se pueden comunicar con sus familiares a través de videomensajes. Hasta ahora, cuenta con usuarios en 30 países, de ellos un 20 por ciento en México y un 15 por ciento en Argentina y fue elegida como una de las 10 mejores nuevas aplicaciones en el pasado Mobile World Congress de Barcelona.
"En Barcelona ratificamos que la relación infancia e Internet es un problema global y no está resuelto en ninguna parte del mundo. Hay mercado para seguir internacionalizándonos", expresó Larre.
El servicio también cuenta con una versión en inglés para acercarse así a los mercados de habla inglesa, en especial a Estados Unidos.
